Si la idea es desenchufarse de la rutina y de la vorágine cotidiana y a la vez aprovechar la naturaleza y los ríos cordobeses, las calles de San Lorenzo son un destino ideal. Este apacible paraje serrano, lleno de naturaleza, vida e historia, se ubica en el Valle de Traslasierra, a dos kilómetros al norte de Villa Cura Brochero y a cinco de Mina Clavero.
La pintoresca localidad ha ido creciendo de la mano del turismo, dado que es una región ideal para encontrarse con la naturaleza y la aventura. Callecitas de tierra y el paisaje rural, caracterizan a este poblado que se refresca con las cristalinas aguas del río Panaholma que viajan por el pueblo de norte a sur, llevando la frescura a quienes visitan sus balnearios en el verano, enamorando con el encanto de una opción diferente en las sierras de Córdoba.
Una de las principales actividades que se pueden realizar aquí es el senderismo, un mix de actividad deportiva y turística que permite recorrer y deleitarse en el entorno natural al tiempo que se realiza ejercicio físico. Es ideal para entrar en contacto con la naturaleza y tener un estilo de vida saludable.
El senderismo puede realizarse de manera autoguiada o bien participar de salidas grupales guiadas para interpretar el ambiente a cada paso. San Lorenzo cuenta con senderos adecuados para toda la familia, con el condimento del encuentro de con antiguas culturas, las costumbres de sus paisanos, y con la posibilidad de capturar en una foto el vuelo de algún cóndor.
Pero para días donde la máxima supera los 25 grados, este paraje ofrece a uno de los ríos más hermosos y puros de la provincia: el Panaholma, además de otros arroyos de montaña característicos del Valle de Traslasierras. El río Panaholma tiene su origen en las Cumbres de Achala y se forma a partir de la confluencia de dos ríos principales, el Taruca Pampa o Rugapampa y La Hornilla. Además, pasa luego por el pueblo de nombre homónimo que le da origen justamente el nombre del río, para transitar así por el paraje San Lorenzo, continuando su recorrido por Villa Cura Brochero y encontrándose con el río Mina Clavero.
En las cercanías, la Cascada del Toro Muerto, una caída de agua natural de 8 metros de altura, se constituye en un gran atractivo. Mientras que Las Maravillas, es un excelente balneario natural sobre el río Panaholma, entre una quebrada y un liso de piedra de 40 metros. El río atraviesa piedras y arena, con zonas bajas que disfrutan los niños; su recorrido ofrece gran diversidad de opciones para entretenerse en el agua, también hay hondos piletones ideales para nadar y distenderse.
Además de poseer una cultura propia, que se manifiesta a través de la historia con sus pictografías rupestres de los primeros habitantes del lugar, y su característica rural serrana, San Lorenzo propone una alternativa que caracteriza a la región. Es posible adquirir aquí productos artesanales con su sabor exquisito, panes, dulces, licores y cervezas, le dan un dejo identitario al paraje que lo convierte aún más atractivo.