viernes, 4 octubre, 2024
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Diego Arranz: fotos en parajes rurales, lugares recónditos y cielos estrellados

Diego Arranz es una de esas almas curiosas, que le gusta mucho viajar y que lleva, además, su conocimiento a rincones inimaginables. Fotógrafo y uno de los pioneros de la astrofotografía en la Argentina, recorre el país, los parajes rurales más recónditos y escenarios (muchos extraños) del mundo para captar con su cámara momentos imborrables. Generalmente esos viajes los hace junto a fotógrafos, estudiantes de fotografía o personas que tienen interés por descubrir algunos sitios y costumbres bien arraigadas.

A través de www.fotoescape.com.ar realiza desde hace casi veinte años estos safaris que pueden buscar la huella de la migración judía, revelar el arte de los trabajadores de los hornos de ladrillos o bien llegar al frío de las Islas Malvinas. Pero además, de la mano de www.ojosdecampo.com.ar lleva el amor por la fotografía a los más pequeños, enseñando la técnica en pueblos y parajes rurales.

Si bien la base es “la educación fotográfica”, como le gusta decir a Arranz, lo cierto es que desde Fotoescape realizan salidas a lugares atractivos, muchos de los cuales no están relevados para el turismo masivo. Por eso, este espacio se ha hecho vox populi y participa gente con cámaras compactas y que tal vez tiene un vínculo mayor con disfrutar una salida que con la fotografía en sí.

Las noches tienen secretos para descubrir desde el lente de la cámara. (fotoescape.com.ar)

“La ventaja de no tener una mirada turística sino más bien un enfoque más contemplativo y de observación, hace que nuestros tiempos y el cronograma de actividades sea largo. Ello también está ligado a la fotografía y al tiempo de toma que necesita cada fotógrafo; por lo tanto mucha gente nos acompaña porque no los ‘llevamos corriendo’”, reconoce en diálogo con De Viaje desde San Antonio de Areco.

Entre los que eligen este tipo de excursiones, están los que buscan dejarse sorprender con lugares que, muchas veces, están como escondidos bajo cuatro llaves.  Y en ese sentido, ejemplifica: “Todos conocen Sierra de la Ventana pero muy pocos conocen las Sierras de Cura Malal y Bravard que se encuentran a muy pocos kilómetros”. Para ello, es necesario, mapa y computadora en mano, hacer un trabajo de producción previo a cada viaje, que lo lleva a hablar con referentes del lugar que aportan su conocimiento para que el viaje tenga esos detalles locales únicos.

Los talleres llevan a los viajeros a rincones únicos. (Diego Arranz)

Por el mundo

Cámara en mano, Arranz recorrió la Argentina, países limítrofes y también el exterior lejano. Llevó grupos a Medio Oriente, India Vietnam Tailandia y Camboya. Aunque también los flashes pasaron por Europa y Estados Unidos, con lugares increíbles como el Parque Nacional de Yellowstone, de unos 9 mil km² sobre un área volcánica, o el Yosemite, con sus más de 3 mil kilómetros cuadrados de cascadas rugientes. “Lo que siempre destacamos de la gente que nos acompaña en estos viajes son las emociones y la sorpresa. Amamos nuestro trabajo y no nos cansamos nunca de sentirnos gratificados cuando alguien se deslumbra con lo que ve”, cuenta.

En este sentido, parte de las emociones muchas veces tienen que ver con contemplar un cielo estrellado en un pueblo rural, conmoverse en las Islas Malvinas o descubrir los secretos de una obra de arte en algún museo en Nueva York. “Llevamos a la gente a que vea y aprenda observar esos lugares y que traiga consigo anécdotas que van más allá de las fotos”, sostiene.

Los magia y tranquilidad de pueblos bonaerenses. (Diego Arranz)

La astrofotografía, puntualmente, es una de sus especialidades, y es por eso que no se cansa de destacar la ubicación privilegiada que tiene Argentina y que permite contemplar la vía láctea como en pocos lugares del mundo. Está claro que tomar fotos de noche no es para cualquiera, hay que tener cierta técnica y muchas veces cuando lo queremos hacer nos queda mal. “En este caso se trata de talleres en donde se da un teórico y luego durante la noche se pone en práctica lo aprendido, acompañado por dos profesores que guían a los alumnos en la técnica y en la composición para lograr fotos nocturnas”, dice.

Persiguiendo por el mundo eclipses de sol o auroras boreales, a la fecha, cuenta, no hay un solo fenómeno astronómico que le haya quedado sin relevar y han coordinado grupos para hacer fotografía astronómica de luna llena y luna nueva, lluvia de meteoritos, el paso de la estación espacial, la luz zodiacal y el cinturón de Venus.

La noche tiene su magia. (fotoescape.com.ar)

Con los más pequeños

Ojos de Campo es un proyecto de fotografía qua trata sobre enseñanza de esta rama artística a los chicos que viven en pueblos y parajes rurales. Este proyecto se desarrolla actualmente en San Andrés de Giles desde 2005. “Lo que tiene de importante es que los mismos niños que aprenden fotografía a la larga se transforman en los docentes que vuelven a enseñar en su pueblo”, cuenta con orgullo Arranz.

Según relata, viajó por varias provincias enseñando fotografía a distintas comunidades coyas, mapuches y de otros pueblos originarios. “Hemos expuesto en muchísimos lugares de renombre Buenos Aires en incluso realizamos tres exposiciones en Estados Unidos”, agrega.

Dónde seguirlo

Instagram: @fotoescapefotos – @ojosdecampo

Facebook: fotoescape

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