Ramallo, también en el norte bonaerense, ofrece playas seguras para los meses de verano y una serie de atractivos que convierten a la ciudad en un imperdible para realizar una escapada.
Las playas son las de los balnearios Municipal y Costa Pobre, aunque además hay otros atractivos como la Cascada del club Independiente, las islas Lechiguanas, el puerto, el Club Ramallo, el arroyo Las Hermanas, el castillo Rafael Obligado, la estancia el Oratorio y el Club de Vela Barlovento. Todo para disfrutar en cualquier época del año.
El Paseo Costanero, que está desarrollado sobre la avenida San Lorenzo, es una zona de pequeñas barrancas con vistas panorámicas del río Paraná y sus islas, y donde comienza una extensa playa de arena que se disfruta en los meses de calor.
Otro sitio de interés para los turistas es la plaza José María Bustos, que abarca cuatro manzanas completamente arboladas, que en el centro tiene una réplica de la Pirámide de Mayo y un viejo cañón utilizado en las batalles navales libradas en la zona. También tiene mucha fuerza el segmento del turismo rural en establecimientos de campo de pueblos como El Paraíso o Pérez Millán.
La parroquia San Francisco Javier, de un estilo neogótico donde sobresalen sus pináculos que decoran a una única torre con un vistoso reloj, y el edificio del Palacio Municipal, de características modernas, son otros sitios imperdibles para los visitantes que gustan de la arquitectura.
En los recorridos urbanos no puede faltar una visita al Museo Histórico Municipal, que fuera la sede del Gobierno municipal hasta 1969 y que cuenta con cuatro salas donde se exponen objetos y documentos sobre la historia de Ramallo y mobiliarios que pertenecieron al poeta Rafael Obligado.
Las cascadas naturales ubicadas sobre el arroyo Las Hermanas, a dos kilómetros de la ciudad, con un caudal torrentoso a pesar de ser un riacho de llanura, que desemboca en el Paraná, es otro sitio de interés de Ramallo.
En tanto, el Castillo de Obligado, situado a 20 kilómetros de la localidad, sobresale por su tipo de construcción. Es el sueño convertido en realidad del poeta Rafael Obligado en honor a su esposa. La construcción refiere al típico castillo europeo de tres pisos con ventanales ojivales. Consta de tres plantas, con 24 habitaciones y seis baños. Un gran hall preside la entrada, con tres juegos de escaleras hacia lo alto.
La Estancia El Oratorio., de unas 5 mil hectáreas, es otro atractivo del partido. Fue construida por Manuel José de Guerrico (h), entre los años 1850 a 1860, a la vera del antiguo Camino Real y el arroyo Ramallo. Su casco se levanta en lo que fuera el oratorio privado del Presbítero Juan Gregorio Solla y es puesta bajo la invocación de la Virgen del Carmen.