Sudáfrica, conocida como la “nación del arco iris” es uno de los destinos turísticos de naturaleza más importantes del mundo, con paisajes increíbles, una inmensa diversidad cultural y gran cantidad de actividades relacionadas con la vida salvaje y natural. Safaris, trekking, playas fantásticas, el legado de Mandela y mucho más, se puede conocer a lo largo y ancho del país.
Uno de los principales motivos por los que viajar a Sudáfrica es para poder observar su abundante y variada fauna salvaje: cerca de 300 especies de mamíferos y 850 especies de aves. Visitar una reserva natural o un parque nacional son buenas opciones para ver animales en libertad.
Pero hacia el sur, muchos se animan a descubrir el sitio donde las aguas de los dos océanos, el Índico y el Atlántico, se juntan: se trata del Cabo de las Agujas, el punto más meridional de África. A pesar de no ser tan conocido como el Cabo de Buena Esperanza, el viento y las corrientes se manifiestan con fuerza en esta costa escarpada, donde varios barcos quedaron atrapados y se han convertido en parte del paisaje, que también cuenta con un faro.
Fueron los navegantes portugueses quienes primero doblaron el nombre para llamarlo “Cabo das Agulhas”. El término deriva de la palabra portuguesa “agulhas”, y parece que se refiere a las agujas de las brújulas, que en Agujas apuntaban exactamente hacia el norte geográfico. Otra teoría apunta a que “agulhas” podría referirse a las numerosas rocas, similares a las agujas, que constituyen un peligro para la navegación.
El área alrededor del Cabo es parte del Parque Nacional de Agulhas, el más meridional y también el más reciente de los parques nacionales de Sudáfrica. El parque cubre un área de casi 17 mil hectáreas e incluye un área rica en atracciones naturales y culturales. Su biodiversidad es muy importante, ya que hay alrededor de 2.000 especies de plantas, de las cuales 100 son endémicas.
El área también es un lugar de migración para las aves acuáticas y es muy rica en vida marina gracias a la intersección de las corrientes oceánicas frías y calientes.
Además del aspecto ecológico, el aspecto cultural también es notable. De hecho, se han encontrado evidencias de depósitos arqueológicos del período de migración de Khoisan, término que agrupa a las poblaciones pre-bantúes de Sudáfrica. Incluyendo restos de antiguas trampas para peces de los Khoisan encontradas al este del faro.
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Cómo llegar
Cabo de las Agujas se encuentra a unos 230 kilómetros de Ciudad del Cabo, desde donde se puede llegar por la carretera N° 2. Aquí los veranos son secos y calurosos mientras que los inviernos fríos y húmedos.
Cuánto cuesta
Un viaje desde Buenos Aires a Ciudad del cabo arranca en los US$ 1.300. Si la idea es hacer una excursión desde allí en el día hasta el Cabo de las Agujas habrá que desembolsar unos US$ 150.