JUNÍN DE LOS ANDES
Junín de los Andes, la localidad más antigua de la provincia de Neuquén, encuentra sus inicios en 1883 cuando se levantó un fortín improvisado sobre la margen derecha del río Chimehuín. Años más tarde concluidas los enfrentamientos con los Mapuche y con la instalación de colegios salesianos, finalmente se conformó como población permanente.
La ciudad permite conocer su rica historia a través de sus museos Mapuche y Roca Jalil, visitando el Paseo Artesanal, el Colegio María Auxiliadora, el Santuario Nuestra Señora de las Nieves y de la Beata Laura Vicuña y el imponente Parque Vía Christi en el cerro La Cruz, obra del arquitecto Alejandro Santana. Y a esto se puede sumar el turismo aventura gracias a sitios como el Volcán Lanín, el Lago Tromen y las Termas de Epulafquen, entre otros.
Adentrarse en el Parque Vía Christi permite al visitante vivenciar una experiencia religiosa sumamente conmovedora y cautivante, más allá de la creencia de cada uno. El recorrido emprendido por el cerro de La Cruz propicia el tránsito por distintas estaciones o “solados” que rescatan diversas escenas de la vida de Jesucristo cuya presencia acompaña al peregrino a lo largo de un serpenteante camino que remiten a su Vida, Pasión, Muerte y Resurrección.
El paseo consta de una veintena de estaciones de corte circular, en cuyo centro se alzan distintas figuras modeladas sobre la base de un material austero y rústico como lo es el hormigón armado. Asimismo, cada estación cuenta con un sistema de relieves, que testimonian y documentan el accionar pastoral de la Iglesia Católica en el mundo y particularmente en Latinoamérica.
TANDIL
Si bien Tandil supo derrotar la estacionalidad, la época de Semana Santa la convierte en un destino clásico. Más allá de la celebración religiosa, entre sus bellas sierras, arroyos cristalinos y sus inconfundibles sabores, los rincones secretos de esta ciudad bonaerense ofrece un abanico de actividades para respirar su aire natural. Su renovada propuesta incluye actividades culturales, la cerveza artesanal, el Taller de Picapedreros, paseos guiados y gastronomía para todas las edades y bolsillos.
Sin embargo, en Semana Santa el Vía Crucis al Monte Calvario es el gran imán. Además, uno de los imperdibles para los viajeros es el Cristo de las Sierras. Desde la base de este monumento de 15 metros de altura se obtiene una vista panorámica de 360 grados de Tandil y su entorno.
También están la clásica Movediza. Una senda de 268 escalones de granito conduce hasta la cima de este cerro, de donde cayó al vacío la mole de 385 toneladas en 1912. En 2017, el lugar fue rebautizado Parque Lítico La Movediza y fue instalada una réplica de la famosa roca con la misma forma, textura y color aunque fue construida con un entramado metálico recubierto por resina y fibras sintéticas.
Otros lugares de interés son el Museo Histórico Fuerte Independencia; la Iglesia Luterana Danesa; el Molino Papelero Lamula; y el Museo de Vehículos de Época de Tandil.
PUERTO MADRYN
Puerto Madryn es un destino clásico y curioso a la vez en Semana Santa. Cada año realiza el tradicional Vía Crucis Submarino (único en el mundo) del que participan turistas y residentes, ya sea acompañando las estaciones en tierra, buceando junto a la cruz y en las estaciones subacuáticas.
El Vía Crucis submarino de Puerto Madryn, una actividad religioso turística única en el mundo, volverá a realizarse esta Semana Santa frente a esa ciudad de la costa de Chubut, tras la cancelación del año pasado a causa de la pandemia de coronavirus, informaron hoy autoridades de turismo locales.
La procesión, que reproduce el calvario de Cristo por las 14 estaciones de la Vía Dolorosa, tiene la particularidad de desarrollar una parte por tierra y otra bajo el mar, a cargo de buzos que portan la cruz, acompañados en la superficie por nadadores, remeros y diversas embarcaciones sin motor.
El Vía Crucis submarino, que en 2014 fue bendecido por el papa Francisco, reunió en su 16ª edición, en 2019, a unas 6.000 personas, entre turistas y vecinos, que participaron fuera del agua, y 200 buzos y nadadores en la última etapa, acompañados por más de 100 embarcaciones.
La actividad se hará como en sus ediciones anteriores en el Viernes Santo -2 de abril- desde el centro de la ciudad hasta el muelle Comandante Luis Piedrabuena, donde los buzos se sumergirán y el resto de los fieles los acompañará desde la costa o la superficie. La procesión submarina culminará con la salida a la playa del grupo de buzos que acompañan la cruz, donde los esperará portando velas con tulipas, para orar o unirse en cánticos religiosos.
BARILOCHE
Bariloche es un destino para todo el año, aunque en esta época se disfruta el doble. Y no solo por lo que transmite la ciudad, sino por lo que se puede conocer a sus alrededores.
La desértica Ruta Nacional 40 le da lugar a la 237 -desde donde ya se puede vislumbrar el imponente Nahuel Huapí- que luego se convierte en la calle 12 de Octubre que bordea toda la costanera: kilómetros de un pequeño muro de piedras que divide las playas barilochenses del resto de la ciudad y concede una eterna postal del cordón montañoso que irrumpe el horizonte.
A mitad de camino está el famoso Centro Cívico, un conjunto de edificios estatales diseñados con un estilo arquitectónico bien típico de la zona con paredes de piedra, techos a dos aguas y mucha madera, inspirado en las regiones montañosas de Europa.
Una vez hecho el recorrido urbano, hay que calzarse las zapatillas y entregarse a la naturaleza del Huapí. A 17 kilómetros hacia el sur se encuentra el Cerro Campanario que se puede ascender caminando alrededor de media hora a través de un camino sencillo pero bastante inclinado o en aerosillas.
Aunque este año será diferente, Bariloche también tendrá su cuidada de la Fiesta del Chocolate entre el 29 de marzo al 4 de abril.
Esta edición especial de la tradicional celebración busca equilibrar las actividades y atractivos de la celebración con los protocolos de cuidado para un festejo seguro para todos. Además, este año trabajan en ampliar su alcance mediante la difusión de manera virtual.
Si bien algunas actividades tradicionales de la fiesta no podrán realizarse en función de los protocolos vigentes de prevención, habrá propuestas y atractivos que puedan disfrutarse en esta edición cuidada de la celebración. Uno de los clásicos que regresa es el Paseo del Chocolate, con actividades gratuitas durante los tres primeros días de abril, de 14 a 20 horas.