Desde películas como Thelma y Louise hasta canciones como “Travellin Band” de Creedence Clearwater Revival son las culpables de que queramos agarrar un volante y lanzarnos al asfalto para descubrir, a través de amaneceres y atardeceres, la belleza de los espectaculares paisajes del mundo. Impresionantes parques nacionales, tramos desérticos, pueblos pintorescos, grandes ciudades y playas paradisíacas aparecen a cada kilómetro en las mejores rutas. Si sos fan de los road trips, nada como tener esa libertad de ir manejando tu rumbo, con el viento en la cara, la música alta y una buena compañía.
Ruta 1 – Costa Oeste
La costa oeste de California, en Estados Unidos, es un clásico para hacer alguna vez en la vida. El recorrido ofrece impresionantes vistas de la costa, saliendo del Golden Gate en San Francisco hacia el sur, hasta San Diego. Su primera parada es Santa Cruz, para vivir bien a pleno la esencia de los años 60. Sigue hasta Monterrey, donde se puede frenar para ver el avistamiento de ballenas en la costa, continuando hacia Big Sur, región montañosa que despierta un aire muy hippie. Malibú es una parada obligada para los amantes del surf, con sus playas de impresionantes olas. La ruta sigue hacia Los Ángeles, terminando en San Diego. Se recomienda si tienen tiempo desviar la ruta y pasar a conocer los parques nacionales Yosemite, Secuoia y Death Valley y el grandioso Grand Cañon.
Ruta A1/M31 – Australia
La ruta A1/M31 en la Costa Este australiana combina naturaleza con playa, pasando por diversos paisajes y es considerada una de las carreteras panorámicas más lindas del mundo. El recorrido entero va de Melbourne a Sídney, atravesando tres estados. Desde el auto se pueden ver desde grandes ciudades hasta zonas desérticas, playas vírgenes, cascadas y parques naturales. Este es un viaje ideal para los amantes del mar y los deportes acuáticos. En sus playas se puede practicar desde surf y buceo hasta submarinismo. Los imperdibles: Los Doce Apóstoles (especialmente al atardecer), el parque nacional Great Otway, Hyams Beach (la playa con la arena más blanca del planeta) y Pebbly Beach para ver canguros, y Summerland Beach para ver delfines y pingüinos (y en algunos casos, también ballenas).
Ruta 500 – Costa Norte
La ruta circular que bordea las famosas Highlands en la parte norte de la isla de Escocia, en una extensión de 800 km. Comienza y termina en Inverness, ubicada unos 150 kilómetros de Edimburgo, conectando las ciudades y pueblos costeros de los condados de Wester Ross, Easter Ross, Sutherland y Caithness. Recorre paisajes de cuento de hadas, pasando por varios castillos, lagos y cumbres. No es una ruta muy fácil de manejar, tiene algunos tramos muy angostos, puntos ciegos y curvas cerradas, con lo que hay que tener mucho cuidado. Quienes detienen obligadamente el trayecto son también los castillos o ruinas de éstos, como el de Ardvreck, el de Varrich, el de Mey y el de Dunrobin. Rumbo al sur en dirección a Iverness se puede pasar también por algunas de las destilerías de la zona, como Old Pulteney Distillery o Dunnet Bay Distillery.
Ruta 1 – Islandia
La Ring Road de Islandia, como su nombre lo indica, es circular, y con un máximo de diez días, se puede rodear el país entero en 1340 km de extensión. La ruta comienza y termina en su capital, Reykiavik, atravesando por Sellfoss, Hvolsvöllur, Vík, Kirkjubæjarklaustur, Höfn, Egilsstaðir, Akureyri, Blönduós y Borgarnes. En el camino, se pueden ver glaciares, géiseres, lagunas azules, icebergs y pueblos perdidos entre la nieve. Además, desviándose un poco de la ruta hay todo tipo de atracciones para visitar: parques nacionales, lagos, cascadas, complejos volcánicos, cañones y sistemas de cráteres. Hay que tener cuidado, ya que la ruta está en buenas condiciones, pero al recorrer zonas tan deshabitadas, pueden cruzarse animales. Otro punto a considerar es el tipo de auto con el que recorrer: se recomienda alquilar autos 4×4, más adecuados para este tipo de camino.
Ruta 163 – Costa Amalfitana
Ideal para hacer en verano, con las ventanas bajas disfrutando del aire de mar pegándote en la cara. Empezando por Nápoles, donde obligadamente hay que comerse la famosa pizza napolitana. La ruta se emprende hacia el sur, bordeando la costa del Golfo de Nápoles y el Golfo de Sorrento, pasando por sus pueblitos costeros. De camino se recomienda pasar a visitar la histórica ciudad de Pompeya y hacer el tour por sus fascinantes ruinas donde todavía se pueden ver las marcas intactas del volcán erupcionado en el año 79. Al llegar a Sorrento, se hace una primera parada para dejar el auto y tomarse una lancha hacia la paradisíaca Isla de Capri. Al retomar el auto, se siguen por la ruta pasando por Positano, Canca del Marini y Amalfi hasta llegar a Viertri Sul Mare. Otro lugar imperdible en el camino es Regina Giovanna (Punta del Capo), una laguna natural escondida cerca de Sorrento.
Los consejos
– Tener el registro de conducir internacional
– Ser flexibles con el tiempo: en este tipo de viajes pueden aparecer lugares que no tenías en cuenta en el itinerario, que pueden hacerte desviar un poco el camino, con lo que lo ideal es no estar atado a tiempos.
– Tener un GPS y descargarse antes los mapas para poder usarlos sin conexión a Internet.