Las Bahamas están conformadas por más de 700 islas tropicales ubicadas en el mar Caribe y cuentan con paisajes que parecen salidos de una postal. Las playas de arena blanca y el agua cristalina atraen a visitantes de todo el mundo.
Nassau, la capital de la isla de Nueva Providencia, la más visitada de todas las Bahamas, constituye el pulmón económico y político de la isla y el rincón ideal para desconectar durante las vacaciones y disfrutar de reclamos como la oferta cultural de su casco viejo, su gastronomía o sus impresionantes playas de aguas turquesas.
La urbe, bajo dominio británico, que finalizó en 1973 con la Declaración de Independencia, invita a pasear en carruaje haciendo parada en espacios tan populares como el Palacio del Gobernador, el Parlamento, la Biblioteca Nacional, el Museo Nacional de Historia o la Plaza Rawson Square.
Si el plan en la ciudad es familiar, resulta recomendable visitar el parque acuático de Atlantis y Dolphin Cay o nadar con delfines y leones marinos en el Blue Lagoon Island. Mientras que otra opción es una excursión hacia los cayos de las Exumas o un tour en Fast Ferry hacia Harbour Island.
Sin embargo, todos los que llegan hasta esta tierra piensan en sol y arena. Y está muy bien que así sea. Entre resorts de lujo, los arenales paradisíacos ofrecen una variada gama de alternativas. Una de las mejores playas es Atlantis, que se encuentra el complejo turístico Atlantis Paradise Island Resort.

Sus aguas son calmadas y el ambiente es perfecto para pasarlo en familia. Un dato curioso es que tiene el casino más grande del Caribe. Otra buena opción es Playa Paradise, el “lugar preferido” por James Bond, ya que en el Hotel One & Only Ocean Club se grabó la película Casino Royal estrenada en 2006.
Las Bahamas solían ser un refugio pirata y tienen una fascinante historia para contar que a menudo pasa desapercibida por la cultura de playa. Dedica tu tiempo a descubrir la historia colonial que definió a Nassau.
Para eso es recomendable visitar el Museo Pirata para aprender sobre la vida al margen de la ley de los marineros que gobernaban el mar Caribe, y el papel que tuvieron los británicos para expulsarlos de la región. Sube las escalinatas de Queen’s Staircase para llegar al Fuerte Fincastle y contempla las vistas panorámicas desde la Torre de Agua.