Egipto reabrió las puertas de su icónico Palacio del Barón Empain tras prolongados trabajos de restauración. Ubicado en el corazón del distrito Heliopolis del Cairo, el edificio de 109 años de antigüedad nunca había sido abierto al público y siempre había sido un misterio tanto para los residentes como para los visitantes a la ciudad.
El fundador del Banco Industrial de Bélgica, el Barón Edouard Louis Joseph Empain, construyó esta mansión como su residencia. Su compañía ha dado los derechos para desarrollar la extensión desértica en el noreste del Cairo, que anteriormente fue un nuevo pueblo llamado Heliopolis.
Todos los edificios fueron diseñados para mezclar arquitectura Islámica y Europea, pero el Barón quería que su palacio destacara, así que le encargó el proyecto al arquitecto francés, Alexander Marcel, a quién le pidió que lo construyera como un templo hindú, para que fuera la estructura arquitectónica hindú más grande de Egipto.
Egipto gastó cerca de 11 millones de dólares en el primer proyecto de restauración del palacio. Tiene un sótano conformado por dos habitaciones para el personal de la mansión. El primer piso incluye una recepción enorme, un comedor y una sala de billar. Su primer piso tiene cuatro habitaciones principales, cada una con un balcón con vistas hacia el paisaje de Heliopolis.
Para darle vida a esta ciudad desértica, el visionario Empain construyó el primer tren eléctrico para conectar con los márgenes del Nilo. También construyó el Hotel Palacio de Heliopolis, conocido hoy en día como el Palacio Itihadiya, que ahora alberga el despacho del presidente de Egipto.
