Desde que Cristóbal Colón desembarcó en 1493 y hasta la actualidad, el archipiélago de Puerto Rico, se consolidó como un sitio turístico con una amplia diversidad cultural, gastronomía y celebraciones nocturnas. Compuesto por la isla principal y un número importante de cayos e islas más pequeñas (como Mona, Vieques y Culebra) el Estado Libre y Asociado de Puerto Rico es la costa más cercana de la zona continental de Estados Unidos y uno de los sitios más atractivos en el caribe norte.
Cuando el navegante italiano tomó posesión de la isla, la bautizó con el nombre de San Juan Bautista y, según dicen algunos historiadores, quedó completamente maravillado por el lugar. En 1505 Juan Ponce de León, su primer gobernante, recibió el permiso para explorarla hasta que finalmente la colonizó en 1508, invirtiendo los nombres de San Juan y Puerto Rico, para ponérselos a la capital y al Estado, respectivamente.
En los poco más de 150 kilómetros de largo y 50 de ancho que ocupa la isla de Puerto Rico se sintetizan todos los atributos del Caribe, esos que cada año atraen a miles de turistas de todo el mundo. Desde playas y aguas soñadas, pasando por lugares de selva y montaña, hasta llegar a gente amigable y cosmopolita, esta joya transmite un magnetismo especial. Principalmente, esto se ve en las calles de su capital, San Juan, donde sigue viva la impronta de la época colonial de América latina.
Las fachadas de las casas, los edificios históricos y los fuertes, como el San Felipe del Morro, o el Castillo San Cristóbal, considerada la fortificación más grande construida por España en el Nuevo Mundo y declarado Patrimonio de la Humanidad, hacen que recorrer la ciudad sea una experiencia histórica inigualable.
El primero de ellos, San Felipe del Morro es una fortificación española del siglo XVI construida en el extremo norte de San Juan. Por muchos años vigiló la entrada a la bahía y protegió la ciudad de ataques marítimos. El morro se refiere a una porción de tierra o peñasco que sirve para observar un lugar. Es parte del Sitio Histórico Nacional de San Juan y fue declarado Patrimonio de la Humanidad.
Otro de los sitios históricos que se deben visitar es la Fortaleza, actual residencia oficial del gobernador de Puerto Rico y de su esposa. Fue construida entre 1533 y 1540 para defender el puerto de San Juan de Puerto Rico. El edificio es conocido también como El Palacio de Santa Catalina, en honor a Santa Catalina de Alejandría, patrona de la elocuencia, los filósofos, los solteros, las hilanderas, los estudiantes y los dominicos.
También una incursión por la isla nos llevará hasta la capilla de Cristo. Cuenta la leyenda de un jinete que perdió el control en una carrera y cayó al precipicio. El intendente invocó al Santo Cristo de la Salud por la vida del joven y al salvarse construyó la capilla en agradecimiento. Según otros, el joven murió y el edificio se hizo para prevenir otra tragedia.
Mundo natural
Es en el centro del archipiélago donde se encuentra el parque eco-turístico de Toro Verde con el ‘zip line’ (tirolesa) más largo del mundo -con un cable de 2,5 kilómetros- bautizada como ‘El Monstruo’; una experiencia única que se inicia en un puente colgante de 47 metros de largo y 10 metros de alto. Pero Puerto Rico cuenta además con los suficientes recursos naturales para ser un destino de turismo aventura y de naturaleza único en la región, como por ejemplo el bosque subtropical pluvial El Yunque, donde la gran cantidad de precipitaciones anuales producen espectaculares cascadas que se cuelan entre los senderos. Este bosque se halla en la Sierra de Luqillo, y cuenta con rutas perfectamente delimitadas para llegar.
Por otra parte, Puerto Rico ofrece uno de los espectáculos naturales más maravillosos e increíbles del mundo en Bahía Mosquito, en la isla de Vieques: la Bahía Bioluminiscente, un fenómeno en el que el agua se ilumina de forma natural por efecto de los microorganismos. Aunque también existe un lugar que nadie se quiere perder: el Parque Nacional Cavernas del Río Camuy, uno de los mayores sistemas de cuevas en el mundo y -además- es el más grande en Occidente. Las cavernas son parte de una red de cuevas y cursos de agua subterráneos excavadas por el tercer río subterráneo más grande del mundo, el Camuy. El sistema fue descubierto en 1958 y documentado en 1973.
Y en lo que respecta a playas, existe un abanico de 360 alrededor en toda la isla, como Culebra, considerada una las cinco mejores playas a nivel mundial. Otra de las playas para visitar es la Isla Verde, en la zona metropolitana, una larga medialuna de arenas doradas frente a las aguas del Océano Atlántico ubicada a sólo 5 minutos del aeropuerto internacional, mientras que los amantes del surf pueden optar por las playas de Aguadilla, en la zona oeste, lugar conocido como ‘El Jardín del Atlántico’.
Finalmente, la cocina puertorriqueña es la manifestación más vívida de la cultura de la isla, que combina influencias de los taínos (habitantes precolombinos de las Bahamas), indígenas, africanas, españolas e hispanas. Por la calle se puede conseguir una buena comida por pocos dólares y hay para todos los gustos.
El dato
La isla, que es en la actualidad un Estado Libre Asociado a Estados Unidos, con Constitución propia y cierto grado de autonomía, mantiene un continuo debate sobre si perpetuar este estatus u optar por la anexión plena o, incluso, por la independencia. En medio de esto, vive actualmente una fuerte crisis con alta deuda. El índice de pobreza se estancó en un 45%, el desempleo aumentó y hubo una emigración masiva de boricuas a Estados Unidos.